El trabajo Monocapa consiste en el aislamiento mediante una única capa. Este tipo de revestimientos ofrecen muchas ventajas, ya que elimina su preparación con mortero y por tanto, el trabajo se realiza más rapido, ofreciendo calidad con mayor resistencia. El acabado de este procedimiento es uniforme y ligero de manera que tu fachada quedará protegida para fuertes lluvias.